Poemas Ulises II



Ulises, Francisco Bejarano

El peregrino solitario vuelve
después de haber ganado un mundo propio.
Por el camino de albariza llega
hasta su casa, pero ya no es suya,
ni ha salido su perro a recibirlo
hasta morir al verlo de alegría.
Tanto tiempo empleó ganando un reino
que el reino que dejó se fue en el tiempo.


Fue el dueño de estos campos, fueron suyos
los almendros en flor, las amapolas
bajo el aire de marzo, los arroyos
de las lluvias tempranas del otoño.
- ¿Y nada es mío ya? ¿De dónde vienes
buen peregrino? - De ninguna parte,
pues todo estaba aquí. Lentos sus pasos
en silencio desandan el camino.



El Viajero, Carlos Clementson

Ha venido esta noche.
El perro había ladrado por un rato en la sombra,
y luego extrañamente se calló en el silencio.


Pobre y casi desnudo, el mar había labrado
hondos surcos de tiempo sobre su enjuto rostro
de marino o pastor, quemado por los soles,
y dejado en sus párpados un rojor de salitre.

Nadie le conocía. Quizá estuviera loco.
En su delirio hablaba de sirenas y monstruos
de un solo ojo enorme, de héroes y de naufragios,
de aventuras horribles en las que él tuvo parte.

Decía que en un tiempo él fue rey de esta isla.

Aquí ni a los más viejos les sonaba su nombre.

Quizá no fuera nadie:
el viento que del mar sopla en las largas noches.

Se ha vuelto con las sombras.

Poemas Ulises I

Arrepentido Ulises, Juan Antonio Olmedo

Creyéndolos humanos privados de su imagen
te rogué que les dieras su primitiva forma,
el eco de las risas, el sabor de las lágrimas,
el gozo de la amable conversación nocturna
brillando como hoguera que el temor ahuyentaba.

No quiero haber expuesto tantas veces la vida,
que el dolor hizo larga, para ver en sus ojos
dibujarse la burla o escuchar sus engaños.

Devuélveles, oh Circe, sus figuras de cerdos.


Ulises Navegando, Miguel D'Ors

Distanciada por años y batallas
y estratagemas y navegaciones,
Ítaca se diluye en la memoria
de Ulises, que en la popa, pensativa-
mente mira el efímero recuerdo
de espuma que la nave deja al mar.

Se van desvaneciendo las murallas
de la ciudad, los templos soleados,
aquel dorado olor de la vendimia;
los rostros frecuentados están ya 

descompuestos en ojos, y sonrisas
y pómulos confusos, que no logra
agrupar su memoria.
                                                           Ítaca apenas
es algo más que un nombre; sólo un nombre
en el que la esperanza se encastilla.

Análisis: Campaña publicitaria, Honda "Hands"


Campaña publicitaria realizada por la compañía japonesa especializada en tecnología Honda; la campaña, titulada "Hands" (Manos) hace un repaso por la historia de la compañía y los diferentes productos que fabrica: motos, coches, lanchas, aviones y robots.

El anuncio, desarrollado por una de las agencias del momento en el mundo, Wieden + Kennedy, con sede en Londres, se destaca por varios puntos: utiliza un único plano durante los casi dos minutos de duración y sólo tiene una locución inicial de pocos segundos con esta frase: "Veamos lo que la curiosidad puede hacer", mientras se muestran las manos del protagonista sosteniendo una tuerca.

Durante el transcurso del anuncio, que utiliza de forma inteligente y cuidada la tecnología de animación CGI (Imagen generada por Computadora gráfica), se pueden ver varios productos icónicos de la firma oriental, incluso al famoso robot ASIMO diciendo "Buenas Tardes", en japonés.

El anuncio termina con el logo de Honda y su slogan de los últimos años "El Poder de los Sueños" (The Power of Dreams).

Anállisis: Vino Circe/El Mito de la Diosa Circe



El vino Circe Verdejo 2012 (D.O. Rueda), de Bodegas Avelino Vegas, ha sido elegido Mejor Vino Blanco del Mundo en la XIX edición del Concurso Mundial de Bruselas, el más prestigioso de los que se celebran en Europa en la actualidad. Se trata de un vino singular, del que sólo se han elaborado 12.000 botellas. De color amarillo pajizo, pálido y muy luminoso, procedente de uvas de viñas viejas de la provincia de Segovia, vendimiadas a mano en su punto óptimo de maduración, despliegando aromas de frutas exóticas, flores blancas y aromas varietales.

Desde que en 1994 Louis Havaux celebrara en Brujas (Bélgica) la primera edición del Concurso Mundial de Bruselas, este certamen ha sabido evolucionar hasta ser un referente de prestigio en los cinco continentes. En la presente edición, celebrada en la localidad eslovaca de Bratislava,305 especialistas del sector vinícola (periodistas, productores, enólogos, sumillers, etc.), procedentes de 40 países (entre ellos Australia, Brasil, Canadá, China, Chile, España, Francia, Italia, India o Polonia), han sido los expertos internacionales que han decidido qué vinos eran los más sobresalientes de entre las 8.200 propuestas de medio centenar de naciones.




Odiseo y su tripulación llegan a la isla de Eea, tras estar en el país de los lestrigones. La mitad de sus hombres son enviados a hacer un reconocimiento de la isla, al mando de EurílocoTodos se adentran en la isla, y llegan a un valle, donde hay un palacio brillante (Odiseo mandó desembarcar a la mitad de la tripulación, y él se quedó en las naves con el resto), Circe invitó a los marinos a un banquete, hechizó la comida con una de sus pociones y luego, cuando se hubieron atiborrado, empleó una vara para transformarlos en cerdos. Sólo logró escapar Euríloco, que desde el principio sospechaba una traición. Tras esto, avisó a Odiseo y a los otros que habían permanecido en los barcos.

Odiseo partió solo al rescate de sus hombres, pero en el camino fue interceptado por Hermes, quien le mostró la planta moly, que le serviría para protegerse del encantamiento. Cuando Circe no pudo convertirlo en animal, Odiseo la obligó a devolver a sus hombres la forma humana.

Circe acabaría enamorándose de Odiseo, y lo ayudaría en su viaje de regreso a casa después de que él y su tripulación pasasen un año con ella en su isla.



Circe Esgrime Un Argumento, Silvia Ugidos

Si regresas, Ulises,
encontrarás allí en Ítaca una mujer cobarde:
Penélope ojerosa
que afanosa y sin saberlo
le teje y le desteje una mortaja
al amor. Ella pretende
aferrarse y aferraros a lo eterno.
Si regresas
hacia un destino más infame aún
que éste que yo te ofrezco
avanzas si vuelves a su encuentro.
Más enemigo del amor y de la vida
que mis venenos
es vuestro matrimonio, vil encierro.

Quédate, Ulises: sé un cerdo.